Riberas del Ebro en enero de 2008.
(Foto: F. Pellicer)
Este lugar fue durante más de 30 años un vertedero. La apropiación de los nuevos espacios públicos por la ciudadanía es la mejor prueba del éxito de la intervención.
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Sin duda aquellos que solo lanzan críticas contra la Expo 2008 se arropan bajo la ignorancia de quienes no pudiendo participar activamente en un proyecto vital para la ciudad de Zaragoza prefieren, no solo no documentarse adecuadamente para esgrimir sus argumentos, sino mantenerse ajenos desde sus despachos, a los nuevos espacios públicos que los ciudadanos normales y sus familias ya han comenzado a disfrutar hace tiempo y con los que están encantados. Preguntadles a todos ellos, que son muchos, pero claro, no hacen tanto ruido como los "cenizos" a los que se da cobertura desde diversos medios porque al parecer se vende más lastrando un proyecto que ha conseguido mejorar muchas cosas en esta ciudad, impensables hasta ese momento y en un plazo más que razonable y que ha generado un sentimiento colectivo de orgullo en muchos zaragozanos. Y todo esto, es bastante más, que suficiente.
ResponderEliminarGracias, Ángela. La verdad es que hay mucha gente de la más variada ideología y formación que disfruta de los nuevos paisajes de Zaragoza
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