Gotas de regeneración

Contemplo las gotas en tensión sobre la superficie pilosa. Las pequeñas esferas terminan rodando, llevando consigo las partículas de polvo. La hoja recién lavada ofrece una imagen impecable y limpia.
Oigo mientras un debate sobre la subida de impuestos, mentiras y promesas incumplidas antes de que el gallo cantase tres veces. Vuelvo a las gotas que resbalan y mantienen la superficie inmaculada. Y pienso en la regeneración política que no será posible sin la regeneración ciudadana. Y pienso cuando pagamos al dentista o al albañil que nos cobra sin IVA y sin factura o contratamos sin seguridad social a la empleada doméstica que cuida de nuestras personas mayores... y en la autocomplacencia y el aplauso social frente a tales prácticas... y pienso que así no tenemos legitimidad para acusar al representante político corrupto por que es uno como nosotros -con un grado de responsabilidad superior-. Quizás eso explique el éxito en las elecciones de determinados personajes -muy repartidos bajo diversas siglas- que espero terminen devolviendo lo robado y en la cárcel. La crisis sería muy saludable si, como estas gotas, sirviese para lavar nuestras conductas poco cívicas. No tengo ninguna razón para creer que esto sea posible pero necesito la utopía como el aire y el agua. Habrá que copiar de la naturaleza que ha sabido evolucionar y elaborar sofisticadas estrategias para vivir.